Había una vez dos residentes de un colegio para sordomudos que se estaban peleando. Llegó entonces un profesor a separarlos, y comprobó que uno de ellos le estaba dando la espalda al otro partiéndose de risa.
- ¿Dónde está la gracia? ¿Por qué está tu compañero tan enfadado? - le preguntó por señas al que se estaba riendo. Y éste le respondió al profesor, también por señas:
- Porque está tratando de insultarme y echar pestes sobre mí, pero yo me niego a mirarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario